jueves, 10 de enero de 2013

No había pierde: si querías llegar al festival de música sólo tenías que seguir a todos. Así es. Salimos de la casa y bajamos las escaleras de la entrada del metro más cercano y ¡voilà! Nos encontramos con una gran cantidad de jóvenes esperando, sentados en las bancas, en el piso, unos sobre otros. Claro que teníamos que seguirlos no solamente porque asumíamos que iban al mismo lugar que nosotros sino porque nunca se nos ocurrió preguntar dónde era y cómo llegar, así que básicamente no nos quedó de otra.

En el vagón podías sentir emoción en el ambiente, muchos alemanes a diferencia de nosotros, tenían planeado ir con meses de anticipación. Había de todo: pelo verde, morado, niñas rapadas, perforaciones, tatuajes, expansiones... La verdad es que el panorama no era tan malo como probablemente suena. Como ya les dije me encanta meterme entre la gente y blend in así que no me asombré de cuanta excentricidad vi. Siempre actuamos como si fuera nuestro pan de cada día. Honestamente puedo pensar en muchos otros países en donde ir a un rave underground me daría miedo, pero en Alemania me siento muy cómoda, muy segura, tal vez por eso siempre que pude regresé. Y cuando no podía encontraba la forma.

Nos bajamos donde todos y continuamos siguiendo a la gente. En la entraba dejaban sus botellas vacías de cerveza, las cuales eran rápidamente recogidas por señores que las recolectan por dinero o las reciclan.. NUNCA se vio sucio, ni entrando, ni saliendo.

Todas las calles rebozaban de jóvenes rebeldes sin causa + educados. Por más que pertenezcan a una tribu urbana, su cultura se les impone ante todo, es decir, por más punks que se quieran ver, son corteses y amables, como si fuera algo que no pueden evitar. Pasaron un par corriendo y aunque apenas me rozaron , se regresaron a ofrecer una disculpa. De verdad increíble, ya sé que me detengo mucho en esta clase de cosas pero es de lo más interesante. Los baños impecables, todos con jabón y papel a todas horas. En el piso no habían papeles ni botellas, muy a pesar de todo lo que vendían dentro... pero apuesto a que quieren los detalles buenos, no estos.

Resulta ser que el festival tomó lugar en los antiguos hangares nazis, un DJ por hangar y se dividían en techno, techno hardcore y techno hardcorísimo. Había show de lasers y todo lo que pudieras comer y beber. La gente estaba prendida y rara vez cambiaban de hangar, nosotros tuvimos que hacerlo varias veces para que nuestra cabeza no estallara. Mis amigos llevaron una cantidad infame de monerías: máscaras, penachos, lentes con armazones extraños, etc (como parte de lo que llevaban para el tomorrowland)... pero para qué me desgasto en palabras, mejor les muestro un video...

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